Unidad

El siguiente es un extracto de un comentario de la escuela dominical publicado en 1972 por White
Wing Publishing House.
La unidad de los creyentes se basa en su compromiso mutuo con Cristo.”Empero el que junta con el
Señor, un espíritu’’ (1 Corintios 6:17) y son uno entre sí (Gálatas 3:28). Por supuesto, su unión con
Cristo no implica su fusión con Él, ni la unidad de los creyentes implica que deban ser
monótonamente iguales. Más bien, la unidad de los creyentes se manifiesta en su amor por los
demás y en su participación en las vidas de los demás a través de una preocupación amorosa y una
comprensión comprensiva.
Tan fundamental y esencial es la unidad de los santos que el enemigo destruiría el vínculo que los
unía donde le fuera posible hacerlo. A.J. Tomlinson vio la unidad como una de las mayores fortalezas
de la Iglesia y, como tal, sería el objetivo del enemigo en cada oportunidad. En su discurso ante la 24a
Asamblea, dijo: “Dado que existe tal determinación por parte del espíritu de división de derrocar el
espíritu de unidad, siento que debería agregar un capítulo bajo el título de división contra unidad.
Pienso en la unidad como una pequeña fuerza que intenta alcanzar prominencia, y cada vez que
comienza a mostrarse y a abrirse camino hacia arriba, la fuerza mucho más poderosa de la división se
abalanza sobre ella y gruñe, rompe, desgarra, tira y golpea a la más pequeña. fuerza tan
terriblemente que su vida se ve amenazada de una manera que a veces parece que no hay
posibilidad de recuperación…”
Puesto que la unidad es tan vitalmente necesaria, merece nuestra devota atención, para que no sea
destruida por fuerzas que se oponen a la obra del Señor y al bienestar de los hijos de Dios.
Y finalmente, sed todos de un mismo corazón, compasivos, amándoos fraternalmente,
misericordiosos, amigables; 1 Pedro 3:8
Pedro concluye la sección de su carta que exhorta a sus lectores a la sumisión, y en este versículo
presenta un grupo de cinco virtudes cristianas, con el amor en el centro. Después de todo, el amor es
la base de nuestras relaciones mutuas.
“sed todos de un mismo corazón”. Ésta es una marca distintiva de un cuerpo espiritual de cristianos.
Pablo escribió una vez que las divisiones son señal de carnalidad (1 Corintios 3:3). Cuanto más
estemos llenos del Espíritu de Cristo, más estrecho será el vínculo de nuestra comunión.
“Teniendo compasión unos de otros”. Las palabras “teniendo compasión” son una traducción de una
palabra griega de la cual obtenemos “simpatía”. Otras dos palabras griegas proporcionan su origen;
una palabra significa “ser afectado” por algo, o “sentir”; la otra palabra significa “con”. Entonces,
tener compasión es “tener un sentimiento de compañerismo”. Y este sentimiento de compañerismo
se expresa en alegría o en tristeza.

“Amar como hermanos”. Éste, según el Nuevo Testamento, es el deber central de los cristianos unos
hacia otros.
“Sé lamentable”. El amor no puede permanecer escondido en el corazón; debe expresarse con
ternura y preocupación. Es muy interesante que la palabra traducida aquí como “lamentable” o “de
corazón tierno” signifique, en el idioma griego clásico, “valiente”.
“Sé cortés.” Un verdadero carácter cristiano crea un refinamiento de carácter que es más hermoso
que el pulido que se deriva del entrenamiento y el hábito. Esto último es superficial, mientras que lo
primero surge de la esencia misma de la naturaleza cristiana.
Anímense a cultivar el espíritu de amor fraternal y de verdadero compañerismo cristiano. Esta no
sólo es la relación más bendita, sino que proporciona la fuerza que la Iglesia necesita en estos
tiempos modernos.
Escrituras para considerar:
Solamente que converséis como es digno del evangelio de Cristo; para que, ó sea que vaya á veros, ó
que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes combatiendo
juntamente por la fe del evangelio, Filipenses 1:27
Os ruego pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma
cosa, y que no haya entre vosotros disensiones, antes seáis perfectamente unidos en una misma
mente y en un mismo parecer. 1 Corintios 1:10
¡Voz de tus atalayas! alzarán la voz, juntamente darán voces de júbilo; porque ojo á ojo verán que
Jehová vuelve á traer á Sión. Isaías 52:8